Transcripción del castellano antiguo

Nos don Gutierre de Toledo, obispo de Palençia, señor de la dicha villa de Alva de Tormes, enbiamos saludar a vos el conçejo e justiçia, regidores, cavalleros e escuderos, ofiçiales e omes buenos de la dicha nuestra villa, nuestros vasallos, e vos fazemos saber que nos fueron dadas çiertas petiçiones por algunos nuestros vasallos, vezinos e moradores en el término de la dicha nuestra villa, por las quales somos enformado que algunas personas de la nuestra villa e de otras partes algunas que han heredades e bienes en las aldeas del término de la dicha nuestra villa e las non tienen pobladas de yugueros nin renteros, que prendan, por sí e por sus omes, a los ganados de los moradores en los tales logares e lievan dellos grandes penas por los prados que dizen que tienen en los dichos logares, de que se les ha recresçido e recresçe despoblaçión, et porque nuestra merçed e voluntad es que la dicha tierra e término de la dicha nuestra villa sea acreçentada e poblada, por ende ordenamos e mandamos e es nuestra merçed e voluntad que todas las personas de la dicha nuestra villa e de otra parte alguna que tovieren heredades en las aldeas del término della o en alguna de ellas e non labraren en los tales lugares por pan nin por vino, por sý nin por yugueros nin renteros, que non puedan prendar, por sí nin por otro, a los ganados de los moradores en el tal lugar o logares por los prados e pastos que ende ovieren. Et, si contra este nuestro mandamiento qualesquier personas prendaren diziendo que lo han de uso e costunbre, mandamos que por cada vez que así prendaren por las tales heredades que pechen en pena el señor dellas por cada vegada seysçientos maravedís para nuestra cámara, la qual pena mandamos executar a la justiçia de la dicha nuestra villa el día que sabidora fuere dello.
Pero es nuestra merçed que pueda pasçer qualquier heredero o herederos que una yegua (sic) de heredad deslindada o más toviere con sus ganados en el logar do la tovier por lo baldío e foraño, aunque non tengan en ella rentero nin yuguero, guardando panes e viñas e prados e defesas de bueyes.
Et, si en los tales logares tovieren algunos prados que se an acostunbrado de siempre guardar, mandamos a la dicha nuestra justiçia que señale dos omes buenos del logar e, sobre juramento que fagan, tasen lo que vale la yerva de los tales prados en cada año, e lo que así estimaren que lo paguen los vezinos del logar e se aprovechen dello en tanto que lo non arrendaren. Et si alguno labrare en las tales tierras que le pague el terradgo acostunbrado.
Otrosí, mandamos que ningund heredero non pueda cortar leña ni madera de los montes acotados sin liçencia del conçejo del logar, segund que lo han de costunbre, so la pena de los seysçientos maravedís para nuestra cámara, por la qual pena mandamos a nuestras justiçias que luego prenden a los que en ella cayeren.
Et, otrosí, mandamos a las dichas nuestras justiçias que, sin otra luenga, sepan verdad de todas las prendas e penas que han levado en el año que pasó de treynta e uno por las heredades que así tenían en qualquier logar sin yuguero o rentero e las fagan luego tornar a sus dueños que las prendaron.
Et los unos nin los otros non fagades nin fagan ende ál, so pena de la nuestra merçed e de la dicha pena de los dichos seysçientos maravedís a cada uno.
Dada en Valladolid, quatro días de enero, año del nasçimiento del nuestro señor Ihesuchristo de mill e queatroçientos e treynta e dos años.
(Firma)
Episcopus palentinus.


Texto tomado del libro:

- Monsalvo Antón, José Mª: Documentación Histórica del Archivo Municipal de Alba de Tormes (S. XV). Salamanca, 1988. Ediciones de la Diputación de Salamanca.